Principios
de verdad – Teoría social (y 5)
Los
principios de verdad se constituyen en los verdaderos elementos de higiene
política del sistema, esto es, en el conjunto de elementos necesarios y
específicos diseñados para combatir y eliminar la arbitrariedad y el juicio
embustero tan propio de la clase política y, más allá de ésta y de esto, la forma
adulterada de concebir los asuntos del
conjunto de la sociedad.
Esta
sociedad necesita certeza, trasparencia, y para ello una fórmula clara de
determinación. No tiene justificación que utilicemos todos nuestros recursos para
progresar en el conocimiento y que sin embargo la sociedad, su devenir y sus
precursores, no hagan este uso y no tengan un esquema mínimo de trabajo y que
por tal circunstancia estemos expuestos a la ignorancia, la aventura, el
capricho o la maldad.
Los
principios de verdad pretenden ser “las reglas para la dirección de la mente”
en la razón social, o posibilidad de alcanzar un conocimiento social verdadero sistemático
y libre de todo prejuicio, tal como se pretendiera en la Mathesis Universalis.
Nosotros
vamos a debatir —apoyándonos en la estructura que realizó Kant— acerca de los
juicios ciertos en el discurso, y de forma particular en la vida pública. Kant
se preguntó sobre la posibilidad de que existieran juicios universales y que
aportaran conocimiento en la metafísica (y cómo se daban éstos en la matemática
y en la física) y nosotros vamos a preguntarnos sobre la existencia de los
mismos en sociedad y, en consecuencia, sobre la posibilidad de alcanzar un
metaconocimiento.
Posteriormente
estableceremos esta posibilidad a partir de un esquema de funcionamiento (al
igual que Kant hiciera con sus juicios) basado en una especie de categorías y
conceptos a los que denominamos metacategorías, tanto individuales como
universales, dando lugar las primeras a los juicios del alma (principios) en
tanto que las últimas nos proporcionarán los mecanismos de síntesis de la
verdad social (principios de verdad) y, lo que es más importante, de la
jerarquización de las diferentes verdades sociales alcanzadas.
Finalmente
estableceremos la conexión lógica entre estos principios, como elementos de
bipolarización social, su aplicación al efecto transistor y la repercusión
social, esto es las consecuencias de una mayor o menor polarización social como
consecuencia de la existencia de principios de verdad más o menos definidos, el
establecimiento de las diferentes concepciones sociales, soluciones o formas de
determinarse socialmente, así como la repercusión en la vida familiar y en la
educación.
1-Principios de verdad (14ª
entrega)
Todo lo que se establece como
conocimiento claro, como la matemática y la física, se basa en unos pocos
elementos o esquema de trabajo, llámense axiomas o leyes. De otra parte,
podemos decir que reducimos a juicios todas las acciones del entendimiento y
que la física y la matemática son lo que son porque esos juicios son
universales y sintéticos (aportan conocimiento). La pregunta que nos hacemos es
si este tipo de juicios puede ser la base del discurso político y social, y
cómo. Antes de nada, hay que decir que sin necesidad de sofisticar los
recursos, simplemente haciendo uso de los datos, del conocimiento de la ciencia
y de la dialéctica, esta sociedad ya se libraría de buena parte de todo el
engaño y contaminación, que luego da lugar o es fuente de otro tipo de excesos
y corrupciones. Luego vendría la posibilidad de diseñar el citado esquema o un
plan que nos proporcione unas capacidades más allá de las obvias, es decir, de
otorgar al desarrollo social una metodología clara propias de la ciencia que,
dicho sea de paso, hoy por hoy no tiene ni siquiera el armazón económico (la economía como tal, y sus posibilidades de
análisis y previsión) que
sustenta dicho desarrollo.SIGUE